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¡La FIA revoluciona IndyCar con nuevos puntos de superlicencia!

¡La FIA revoluciona IndyCar con nuevos puntos de superlicencia!

Equipo FansBRANDS® |

La Fórmula 1 es la cima del automovilismo mundial, y acceder a la parrilla requiere más que talento excepcional: los pilotos necesitan la prestigiosa Superlicencia FIA, una certificación que asegura que solo los mejores formados pueden competir al más alto nivel. Recientemente, la FIA ha revisado el sistema de puntos para la Superlicencia, generando especial atención hacia el campeonato IndyCar, uno de los mayores proveedores de talentos para la F1 fuera de Europa. Estos cambios prometen transformar el mapa de oportunidades para los pilotos americanos y reconfigurar la relación entre IndyCar y la Fórmula 1.

Hasta hace poco, la distribución de puntos para la Superlicencia no reflejaba el verdadero nivel de competencia que ofrecen las carreras IndyCar. A pesar de tratarse del principal campeonato de monoplazas en Norteamérica, sus pilotos no sumaban tantos puntos como los que competían en la Fórmula 2 europea, lo que limitaba sus posibilidades de ingresar a la F1, a no ser que realizaran un trayecto paralelo en campeonatos FIA. Este tema ha causado debates tras la aparición de jóvenes talentos como Colton Herta, quienes vieron sus aspiraciones de dar el salto truncadas por los requisitos existentes.

La noticia ahora es que la FIA ha actualizado la asignación de puntos en IndyCar —una respuesta casi directa a la creciente demanda de igualdad de oportunidades para todos los pilotos de monoplazas. Según las nuevas normas, los primeros puestos de la general en IndyCar recibirán una cifra significativamente mayor de puntos de Superlicencia, alineando al campeonato estadounidense casi a la par de la Fórmula 2 en la jerarquía internacional de la FIA.

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El nuevo esquema establece que el campeón de IndyCar obtendrá ahora 50 puntos de Superlicencia, haciendo posible el acceso directo a la F1, en tanto que los ocupantes de los siguientes puestos en la clasificación anual también verán incrementadas sus recompensas. Para ponerlo en contexto, la Fórmula 2, la antesala natural de la F1 en Europa, concede 40 puntos al campeón, suficiente para solicitar la Superlicencia. Este cambio histórico otorga el reconocimiento que merecen los pilotos estadounidenses, quienes compiten en circuitos diversos, urbanos y óvalos, y bajo condiciones excepcionales de estrategia y talento.

Además de equilibrar la balanza entre ambos campeonatos, esta medida puede motivar a equipos europeos a mirar con nuevos ojos a la cantera americana. Equipos como McLaren, que ya tiene presencia en IndyCar, podrían beneficiarse al considerar a los mejores pilotos de la serie sin preocuparse por el engorroso trámite de la FIA. Incluso equipos acostumbrados a la F2 podrían buscar pilotos más experimentados, capaces de competir en un entorno fuerte y variado como el de IndyCar.

Para los aficionados a la Fórmula 1, este ajuste de la FIA no es solo una cuestión burocrática: promete una mayor diversificación de estilos de conducción y personalidades en la parrilla. Figuras como Scott Dixon, Josef Newgarden o las nuevas promesas americanas podrían engrandecer aún más el atractivo del paddock, introduciendo factores impredecibles en la lucha por los puntos y el espectáculo en pista.

Este movimiento reafirma la voluntad de la FIA de internacionalizar la Fórmula 1, apoyando el crecimiento del automovilismo mundial y asegurando que los mejores talentos, sin importar su país o serie de origen, puedan llegar a la cima. Con la nueva distribución de puntos, la frontera entre América y Europa se difumina, y los aficionados pueden esperar una F1 todavía más emocionante y diversa en los próximos años.