McLaren es sinónimo de innovación, velocidad y éxitos en la Fórmula 1. Desde su fundación en 1963, la escudería británica ha construido auténticas leyendas sobre ruedas que han marcado épocas y generaciones. En este recorrido repasamos los 10 mejores monoplazas de la historia de McLaren, analizando su impacto, sus logros y el legado que dejaron en el automovilismo mundial.
La historia comenzó con el M7A, el primer McLaren en ganar una carrera de Fórmula 1, en 1968, pilotado por el inolvidable Bruce McLaren. Sin embargo, el verdadero salto de calidad llegó en los años 70 con el M23. Este coche, conducido por nombres icónicos como Emerson Fittipaldi y James Hunt, dominó durante varias temporadas, logrando dos campeonatos de pilotos y dos de constructores entre 1974 y 1976.
Los años 80 representaron la gloria absoluta para McLaren. El MP4/2, armado con tecnología revolucionaria, fue inalcanzable entre 1984 y 1986 gracias a la dupla de Niki Lauda y Alain Prost. Pero nada se compara con el MP4/4 de 1988, probablemente el mejor coche de F1 de todos los tiempos: Ayrton Senna y Prost ganaron 15 de 16 grandes premios esa temporada, un récord casi inigualable. El MP4/4 es el símbolo de la perfección mecánica y estratégica.

En la década del 90, la escudería brilló con el MP4/6, con el que Senna conquistó su último título mundial en 1991. Aquel monoplaza fue el último campeón equipado con motor Honda aspirado, antes del advenimiento de la era de los motores V10, V8 y, más tarde, V6 híbridos. Posteriormente, el MP4/13 de 1998, pilotado por Mika Hakkinen, devolvió la gloria a Woking con un diseño fruto de la genialidad de Adrian Newey, que permitió ganar nuevamente el campeonato mundial.
En el nuevo milenio, el MP4-20 de 2005 se ganó su sitio entre los mejores McLaren. Aunque no logró el título, fue el coche más rápido ese año y ofreció un espectáculo vibrante, especialmente bajo las manos de Kimi Räikkönen. A él le siguió el MP4-23 de 2008, con el que Lewis Hamilton se erigió como campeón más joven de la historia en ese momento, en un final de temporada que mantuvo al mundo en vilo.
La lista de leyendas la completan modelos como el M26 de 1977, el MP4/5 que llevó a Prost al título de 1989, el M29 símbolo de lucha en tiempos difíciles y, en la actualidad, el MCL60 de 2023 y el MCL39 de 2024, que confirman el resurgir de McLaren con Lando Norris y Oscar Piastri a los mandos. Estos coches recientes han devuelto la esperanza de victoria a la fiel hinchada “papaya”.
Los mejores monoplazas de McLaren ilustran la extraordinaria evolución técnica y humana de la Fórmula 1: motores poderosos, aerodinámica de vanguardia y, sobre todo, pilotos excepcionales. Hay un hilo conductor que une estos ganadores: la visión disruptiva y la pasión por la excelencia. McLaren ha sabido liderar revoluciones tecnológicas, desde el monocasco de fibra de carbono hasta la integración de la telemetría y el uso pionero de la hibridación.
Fascinante también es el impacto mediático y cultural de estos autos, en películas como “Rush” o en famosas batallas en circuitos legendarios. Cada McLaren campeón trae consigo historias de triunfos épicos, noches de trabajo incansable y recuerdos imborrables para los fanáticos. El futuro es prometedor: con su legado y su hambre de gloria, no cabe duda de que los mejores capítulos de McLaren en la Fórmula 1 aún están por escribirse.