El equipo de F1 ha pasado por días interesantes y reveladores, de los cuales es muy difícil sacar alguna conclusión sensata de las pruebas en Baréin.
El día de cierre trajo nuevamente interés, especialmente en lo que respecta al clima, ya que esta vez las escuderías fueron recibidas con condiciones mucho más suaves y cálidas. No faltaron otros eventos, ya que Lance Stroll estuvo ausente durante las primeras horas por malestar, un cristal de la parrilla se rompió y luego un autobús que entró a la pista causó una extraña fase de bandera roja... Charles Leclerc logró el tiempo más rápido de la mañana, seguido en segundo lugar por Andrea Kimi Antonelli, y Lando Norris logró colarse en el podio imaginario en tercer lugar.
En las horas de la tarde, el enfoque se centró en los stint más largos, sin embargo, Max Verstappen tomó la delantera y se mantuvo en la cima hasta los últimos diez minutos del cierre de la prueba. En ese momento llegó George Russell, quien finalmente superó este tiempo de vuelta, pero curiosamente el mejor tiempo de los tres días no fue este, sino el resultado de Carlos Sainz logrado en la sesión de ayer. Diferentes compuestos, diferentes tácticas, ocultamiento de rendimiento, eso es seguro, junto con el desarrollo de McLaren y el avance de Williams. Lo demás es imposible de predecir.
Foto: F1
