Lewis Hamilton exigió un cambio táctico en el Gran Premio de Miami, que debe ser aprobado desde el muro de boxes. Bueno, esto sucedió con un gran retraso, lo que enfureció al piloto británico...
El siete veces campeón estaba ardiendo de rabia y no se contuvo en la radio, lo que le valió críticas más tarde:
"No sé qué van a escribir sobre este incidente, pero no sentí que me comportara de manera irrespetuosa. Solo quería que los chicos se apresuraran, porque tengo fuego dentro de mí y porque quiero ganar. ¡Y por eso realmente no voy a disculparme! La victoria es mi objetivo, eso lo sabe todo el mundo en el equipo..."
"Fred vino después de la carrera y trató de calmarme, me dijo: ¡tranquilízate, no seas tan sensible! La verdad es que podría haber dicho cosas mucho peores, como otros ya lo han hecho en el pasado. Lo sentí más como sarcasmo que como insulto. Todos deberían entender que hay una presión increíble sobre nosotros durante las carreras. Uno nunca se expresa de la manera más pacífica en el calor de la batalla, pero creo que eso estuvo bien." - reflexionó Hamilton.
Foto: GiveMeSport
